El arte Bizantino, aquel
que surge en el Imperio Romano de Oriente, caracterizado por el Cesaropapismo y
la Teocracia, se enfrentó a dos problemas constructivos. O mejor dicho, su
arquitectura. En la época de Justiniano los modelos arquitectónicos existentes
para la creación de Iglesias eran los paleocristianos (adaptaciones de la
basílica romana), pero se busca ir más allá, configurar una arquitectura propia
que unifique lo imperial y lo divino. La solución la encuentran en las plantas
centralizadas y las cubiertas con cúpulas.
Las soluciones
arquitectónicas empleadas para las cubriciones: bóvedas de cañón, de arista y
cúpulas esféricas plantearon dos problemas:
- Transición de
la planta cuadrada a la circular
- Contrarrestar
los empujes de las bóvedas
Las soluciones fueron:
- Utilizar
TROMPAS o PECHINAS:
a. Las trompas son pequeñas bóvedas semicónicas
que ochavan el espacio (convirtiéndolo
en planta octogonal).
b.Pechinas son
triángulos curvilíneos que unen los arcos de la base cuadrada (arcos torales) y
el anillo de la cúpula. Esta será la solución adoptada en Bizancio: crea un
espacio más fluido, dinámico y elegante.
|
Cúpula sobre pechinas, iglesia de San Salvador de Cora. |
|
|
|
Cimborrio de la Catedral de Teruel, cúpula sobre trompas. |
2.El peso
excesivo de la cubierta obligó a emplear el ladrillo, más ligero, a veces
incluso cemento unido con pedazos de tejas, sin embargo el peso era excesivo.
Por eso diseñaron un sistema de cúpulas más pequeñas que reforzaban al
principal, y estas a su vez reforzadas con otras más pequeñas, exedras o
contrafuertes. Un auténtico juego de volúmenes superpuestos en descenso desde la cúpula central.
|
Iglesia de San Salvador de Cora |
|
Santa Sofia de Constantinopla |
No hay comentarios:
Publicar un comentario